jueves, 21 de octubre de 2010

¡Celebra la vida!

Aquí os pongo otra canción con un mensaje extraordinario: nos invita a celebrar la vida, segundo a segundo, todos los días. Fijaos bien en toda la letra porque no tiene desperdicio. Nos habla de repartir alegría, no herir a nadie,... y de no olvidarnos de que este mundo no es para siempre. ¿No os suena todo eso?
Que disfrutéis el video de Axel!!!

15 comentarios:

EMMA1ºA dijo...

esta cancion es lo mas tiene mucho ritmo.dw

sergio dijo...

Es una canción preciosa, con un mensaje totalmente cristiano. Ahora se trata de ponerla en práctica. Me alegra, Emma, que te haya gustado

Javier 1ºA dijo...

A mi tambien me ha gustado mucho hasta mañana.

maria 1ºA dijo...

esta cancion es muy xula. tiene mucha marchita eh??
dw

emma 1ºA dijo...

hoy me lo e pasado genial en clase escuchando la cancion.a sido la clase mas divertida de todo el dia.bs

Paula1ºX dijo...

la verdad esque esta superchula la cancion de axel hoy la hemos escuchado en religión y esta guay ademas utiliza un mensaje muy bonito

Elenaa dijo...

A mi esta cancion me a gustado muchoo!!

sergio dijo...

Veo que os ha encantado la canción. Me alegro mucho. La verdad es que a mí también me pone las pilas. Acordaos de decirme si conocéis alguna para colgar en el blog (pero que tenga un mensaje chulo)
Nos vemos en clase

Sara 1ºX dijo...

a mi me ha gustado mucho! :)

Soraya 1ºD dijo...

la cancion es muy bonita por que hay que disfutrar todooo!!! =)

sergio dijo...

La canción es una invitación a fijarnos en lo bueno que hay a nuestro alrededor.
¡Hay tantas cosas bonitas en la vida para disfrutar!

Aprovechémoslas!!!

maria 1ºa dijo...

tiene muxa diversion

emma 1ºA dijo...

cada vez q la escucho tengo ganas de bailar tiene tanto ritmo,ademas de la letra y el mansaje tan xulo.bs

Ana2C dijo...

me encanta esta cancion y tiene una letra muy bonita




att:ana

Sharon Backaert 1 ESO A. dijo...

Que bonita canción no he podido evitar volver a ponerla, Sergio sigue poniendo música que es un muy buen método para aprender a apreciar a dios y por tanto a nuestra propia cultura.